Los líderes de Recursos Humanos viven un momento crucial: seguir operando como un área staff que ofrece servicios que se repiten cada año y cuyo impacto es difícil de cuantificar, o transformarse en un socio de la Alta Dirección que cambia y se adapta constantemente al ritmo que marca el mercado.
Actualmente, quien dirige un área de Recursos Humanos tiene un gran beneficio al contar con información basada en datos sobre tendencias de contratación y retención de colaboradores en la empresa; monitoreando de forma diferente el desarrollo del talento y adaptando los reconocimientos e incentivos para que impulsen el aprendizaje y la innovación y diseñando indicadores cuantificables que realmente reflejen la eficiencia de su trabajo diario. Tener acceso a herramientas tecnológicas es una vía para lograr lo anterior, pero requiere del desarrollo de capacidades analíticas importantes.
Si definimos capacidad analítica como el uso de estadística descriptiva con base en datos generados por los procesos de Recursos Humanos; el desempeño organizacional y comparativos de mercado; quizá no pensemos en quienes tradicionalmente han desempeñado la función de RH. Actualmente, esta responsabilidad enfrenta la necesidad de transformar su trabajo en una labor que genere un impacto positivo en el modelo de negocio gracias a su capacidad directiva de decidir y ejecutar con base en los datos obtenidos.
Recientemente conocí dos ejemplos de este tipo de impactos positivos. Inditex, la multinacional española del mercado de moda, desarrolló seis indicadores de desempeño a partir de los datos históricos generados por sus colaboradores. Este ejercicio inició de la evidencia que tenían al alcance los gerentes de RH y se tradujo en un mejor desempeño de sus puntos de venta.
El segundo ejemplo del impacto del uso de datos desde RH lo ejecutó Bank of America. En un proyecto contratado con Humanyze, empresa proveedora de software analítico, desarrollaron una credencial de identificación con micrófono para los colaboradores, tecnología infrarroja y bluetooth para recolectar datos. Descubrieron la importancia de la interacción entre compañeros como principal predictor de productividad. Esta información les permitió implementar acciones para mejorar el ambiente laboral que resultó en un incremento en el trabajo en equipo, una reducción en el estrés y una mayor productividad por colaborador.
Contar con esta mentalidad de investigar, conocer a profundidad y experimentar con la ayuda de tecnología, es la base para que los equipos de Recursos Humanos avancen en la integración de nuevas capacidades para seguir evolucionando sus procesos y ofrecer una propuesta de valor más atractiva a todos los usuarios de sus servicios.
Cambiando las métricas de desempeño organizacional
El ritmo de trabajo al que estamos sometidos en la actualidad genera una fuerte presión en las posiciones de dirección, por lo que es vital que RH cuide el manejo de información que se genera de las actividades diarias de los colaboradores. Contar con datos correctos y confiables, presentados de manera consistente, puede hacer la diferencia en cualquier organización.
RH necesita ser muy cuidadoso en medir el impacto del uso de la tecnología y el análisis de datos en sus operaciones diarias. Actualmente han cambiado algunas métricas sobre los procesos clave, por ejemplo:
- El porcentaje de aceptación de ofertas laborales.
- El índice de retención de posiciones clave.
- La proporción de nuevos colaboradores que alcanzan alto desempeño en su primer año de trabajo.
- El Employee Net Promoter Score (eNPS).
Este tipo de mediciones ayudan a convertir datos en iniciativas útiles que generan valor para la Alta Dirección.
Evolución del ciclo de gestión de talento
Si bien las etapas de este ciclo no cambian de nombre, las características con que se aplican son muy diferentes y se mantienen en constante evolución.
Atracción
Este mundo 4.0 cambió la definición y naturaleza del trabajo en algunas áreas de las organizaciones, lo que hace necesario atraer personas que posean habilidades digitales y conocimientos de programación, desarrollo web y solución de problemas, así como capacidad de desempeñar tareas de análisis de datos, conocimientos estadísticos y actitud abierta a la innovación.
La manera de hacer contacto con este tipo de perfiles también cambia: ciertas redes sociales, juegos y competencias interactivas son el espacio donde se les encuentra y se hace un primer contacto.